Conoce los diferentes tipos de tintas inkjet

· 30 de January de 2018

En la actualidad, existen muchos métodos diferentes de imprimir nuestros trabajos profesionales. Uno de los más utilizados es la impresión digital, que nos ofrece un gran abanico de posibilidades en cuanto a tipos de tinta se refiere. Las tintas utilizadas en el proceso de impresión digital son las inkjet, que se imprimen sobre el soporte mediante su pulverización. Dentro de este grupo podemos encontrar varios tipos de tintas inkjet que conviene conocer para saber cuál es mejor utilizar dependiendo del tipo de acabado que queramos obtener en la impresión de nuestros proyectos.

Tintas de sublimación

Las tintas de sublimación están hechas para que penetren en tejidos generalmente de poliéster, bien sea en el propio textil o en un recubrimiento de este tipo de tela sobre otro objeto sólido. Esta tinta se inyecta mediante cabezales piezoeléctricos, en un papel de sublimación, que actúa como una especie de transportador temporal de la tinta. Después, se transfiere la tinta sobre el material mediante calor con una plancha transfer. Es en esta parte donde la tinta hace honor a su nombre, ya que se convierte en vapor, en un proceso llamado sublimación, y así es absorbida por el poliéster.

A veces, también se imprime por sublimación directamente sobre el textil, aplicando directamente la tinta sobre el tejido, que más tarde se fija mediante la plancha transfer o la calandra, para producir de este modo la sublimación en las propias fibras del tejido en el que se ha impreso.

Este tipo de tinta se utiliza sobre todo en textiles, pero también en todo tipo de superficies planas o con una ligera curvatura con recubrimiento de poliéster y que se pueden colocar sobre la plancha transfer, como por ejemplo fundas de móvil u ordenador, tazas de cerámica, portarretratos, etc. Este tipo de tinta se utiliza con impresoras con cabezales piezoeléctricos.

Tintas acuosas o base agua

Las tintas acuosas deben su nombre a que el agua es la base de su composición. A ésta se le incorporan tintes o pigmentos que le dan el color. Dependiendo del presupuesto y acabado que queramos, elegiremos tintas acuosas con tinte o con pigmento. Con tinte los colores son muy vivos y además es más económica, pero pierden el color rápido.

Los pigmentos son más caros, pero también más resistentes, por lo que a veces conviene más invertir en este tipo de tinta acuosa si lo que queremos es un resultado de calidad a largo plazo. Y es que las tintas de calidad fotográfica que han sido elaboradas por pigmentos pueden durar incluso más de un siglo, siempre que se mantenga en las condiciones adecuadas.

Otra ventaja de este tipo de tintas es que no son tóxicas, además son inodoras. Un inconveniente es que, si se quiere optimizar la calidad de la impresión mediante este tipo de tinta, se deberá aplicar un recubrimiento especial, para que se absorba mejor la tinta, lo que incrementa el precio respecto al de otros tipos de tintas inkjet.

La tinta acuosa se utiliza normalmente sobre papel y cartón; fotografías, posters, carteles, lienzos, catálogos… y embalajes de alimentos, ya que como hemos dicho antes, no es una tinta tóxica. Este tipo de tinta es el más utilizado en la impresión digital. ¡Muy importante! Nunca debes elegir la tinta acuosa si tu trabajo va a estar ubicado en el exterior, ya que es muy probable que se deteriore. Las impresoras que utilizan esta tinta son las de alimentación por bandeja de hojas, cabezales térmicos o piezoeléctricos.

Tintas solventes

Las tintas solventes se llaman así porque la base de disolución es un solvente volátil, el cual se encarga de transportar los pigmentos. Este tipo de tinta es muy útil para proyectos de exterior, ya que es muy resistente frente a la luz solar. Además, el resultado es muy duradero, y puede usarse en soportes de papel y plástico. El solvente de la tinta se disuelve sobre el plástico, y de esta forma el pigmento del color se queda fijado al soporte una vez el solvente se evapora. En plásticos se estima una vida útil en exterior de aproximadamente cinco años.

El principal inconveniente de estos tipos de tintas inkjet son las sustancias volátiles que contiene el solvente, que generan un olor intenso durante el secado e incluso después del mismo. Es por eso que este tipo de impresión no se recomienda para artículos que vayan a estar en interiores. El tipo de impresoras que se utilizan para inyectar este tipo de tinta son las de cabezal piezoeléctrico de gran formato.

Tintas Ecosolventes

Este tipo de tinta se comenzó a desarrollar en el año 2000, como alternativa a sus hermanas solventes, que como ya hemos comentado antes, producen un intenso olor y además son tóxicas. Éstas contienen menos componentes tóxicos y además no generan apenas olor, por lo que puede utilizarse en espacios cerrados. Eso sí, este tipo de tintas, a diferencia de las solventes, tan sólo tienen de 18 meses a 3 años de vida útil.

Esta tinta se seca muy rápidamente y los artículos impresos pueden manipularse sin problema. Aun así, durante las 24 horas posteriores al tratamiento puede desprender cierta evaporación, por lo que, si tu intención es laminar la superficie impresa, deberás esperar para evitar que se generen burbujas de aire.

Aunque puedas encontrar multitud de tintas ecosolventes de diferentes fabricantes, no todas son realmente ecológicas, ya que muchas empresas le han puesto el prefijo ‘’eco’’ sin que realmente estén libres de toda toxicidad. Este tipo de tinta se utiliza en impresoras de cabezal piezoeléctrico.

Tintas de curado UV

Este tipo de tinta necesita luz ultravioleta para adherirse al soporte en el que se han impreso. Mientras tanto, se mantienen en estado líquido. Es cuando entran en contacto con esta luz cuando reaccionan, curándose y polimerizándose hasta construir una capa resistente y duradera, y con unos colores muy vivos. Este tipo de tinta puede durar hasta cinco años en exterior, y no es necesario utilizar una gran cantidad de producto durante la impresión, por lo que suele salir rentable.

Tinta sólida

El estado original de esta tinta es sólido. Sólo es al calentarse cuando pasa a estado líquido, y se puede imprimir sobre un soporte frío, en el que se solidifica al instante. La mayor ventaja de esta tinta es que puede aplicarse a cualquier soporte, ya que no necesita ser absorbida por el mismo. Pero tiene un inconveniente, y es que no son muy resistentes al roce, y tampoco consiguen un nivel alto de detalle.

Tinta de látex o de resina

La tinta de látex está compuesta por agua, resinas de curación por calor y unos aditivos que son los encargados de fijar los pigmentos a nuestro soporte. Son parecidas a las tintas solventes, con la diferencia de que éstas son inodoras y además no son tóxicas. Se utilizan comúnmente en la decoración de paredes, para imprimir fotografías, cartelería y en vinilos.