La creatividad es una cualidad esencial en el diseñador gráfico, en el comunicador visual, en el publicista, en el maquetador, etc. Pero existe un paso en donde todo nuestro ingenio, toda nuestra obra, nuestra pieza de comunicación, puede verse afectada por cuestiones ajenas a nuestro proceso creativo. Se trata del momento de materializar nuestra creación, a la hora de llevar nuestro proyecto a imprenta. ¿De qué ha servido tanto proceso previo, tanto estudio del color, tipografía y formas si luego todo puede echarse a perder por un mal paso técnico?
Es ahí en donde nuestro papel cobra relevancia. A partir de tu original preparamos el arte final correcto para que no haya posibilidad de fallos en la impresión. Cuidando cada detalle técnico para que aquello que ha salido de tu mente llegue a plasmarse en el soporte final a la perfección.